Time lapse de la moda masculina: el traje de baño.
El sitio de modas Mode.com ha publicado recientemente un “Time Lapse” dedicado al traje de baño masculino. Para quienes no saben que es un Time Lapse les comento que estos corresponden a videos que permiten apreciar un proceso y cambios de manera comprimida respecto a algo que demora mucho en manifestarse. Lo más común suele ser ver las plantas crecer, lo que sucede en una esquina determinada, etc.
Ejemplo de un Time-lapse con una flor.
En el video de Mode.com se puede apreciar una tendencia de una prenda que nos gustaría comentar aquí.
La moda, como muchos elementos, nos permite re-pensar cómo se constituye lo masculino en términos generales. Ciertamente las mujeres y sus trajes de baños también han tenido su evaluación muy marcadamente hacia lo más reducido. La pregunta que se puede hacer es entonces ¿y qué tendencia sigue la moda de trajes de baño masculinos? Cuando se habla de esta segunda piel, como es la ropa, no deja de tener una relación directa con cuanto, culturalmente, es lo que se muestra, en este caso, del cuerpo masculino.
Ciertamente hay una tendencia, si vemos el video, hacia el achicamiento, y porque no también que son siempre ajustados, pero notamos también una vuelta, a partir de los '80 hacia una tendencia que más vuelve a tapar el cuerpo masculino. ¿Por qué? ¿Hay un conservadurismo operante respecto al cuerpo masculino?
El Time-lapse de Mode.com demuestra que desde que se inventó el bañador en el año 1915 y hasta el año 1975, el traje de baño masculino fue siempre muy ajustado. Además las imágenes dejan en evidencia también que desde el año 1935 y hasta el año 1975 el traje de baño masculino fue simplemente “un calzoncillo de baño” (Zunga) que año a año reducía más y más su tamaño.
Desde el año 1985 el Time-lapse demuestra que el hombre comenzó nuevamente a “taparse” ya que el traje de baño masculino comienza a alargarse en las piernas y por primera vez a “holgarse” ya que antes SIEMPRE el traje de baño masculino fue ceñido al cuerpo.
Uno de los eventos masivos y en donde el cuerpo masculino se vio en su esplendor (desnudo) fue en el evento de Tunik, pero ciertamente si bien no estamos hablando de “nadar en bolas” pero estamos bastante cerca. Estamos preguntándonos qué importancia tiene que el traje de baño masculino tenga o no ciertas características que nos acerca o aleja de ciertos análisis posibles que podemos hacer al respecto. Es sobre ese cuerpo real, marcado, gordito etc, que se va la zunga. Tiene mucho que ver con los niveles de autoestima, sentimientos de culpa o no querer ser estigmatizado o señalado como un zungero.
Mostrar el cuerpo masculino es desplegar sus bondades físicas, cuando las haya o no, pero que también implica la marcación de un límite, de cuanto mostramos a un observador/a. Y ese límite es lo que se pone en juego cuando preguntamos por el tamaño del trabaje de baño. Entonces, frente al video, nos preguntamos: ¿Qué nos dice la moda cuando muestra que el traje de baño vuelve a tapar más?
Ciertamente el hito de Tunick es eso, evento único y particular pero el traje de baño, la zunga, tiene una relación no desde lo extra-ordinario (común) sino con la vida cotidiana y como los varones nos vinculamos, en el día a día, con una prenda como la zunga. Sentirse cómodo con una prenda ajustada como la zunga, y que tiene asociaciones con una identidad marginalizada, homosexualidad, delata un miedo de cómo la sociedad pone una etiqueta al zungero pero que, a la vez, también está asociada a una posibilidad de desarrollar un autoestima bastante abollado de la identidad masculina chilena.
Dado que lo masculino o los varones está y estamos usualmente puesto en escena (social) desde la óptica de lo “machote” entonces preocuparse de la imagen, ordenado, etc. es justamente lo contrario a una negligencia estética (en general del autocuidado) por parte del varón porque “eso es de mujeres”. Si somos preocupados de nuestra estética entonces se configura el acto narcisos, y se asume como un acto femenino per sé, y el macho no tiene cabida en ese campo.
Y es en ese campo que la zunga se sitúa, en el intersticio de lo “no tan masculino”, que incluso algunas mujeres se oponen a su uso. Y eso porque la categoría de género es transversal dentro de la sociedad, y que configura cómo debe ser (vestirse, comportarte, sentir etc.) un sujeto masculino (su estética).
Video: 100 años del traje de baño masculino.
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